A flor de piel

A flor de piel es una enorme manta hecha a partir de miles de pétalos de rosa cosidos entre sí. Salcedo y su equipo cosieron pétalo por pétalo con hilo quirúrgico, como un cirujano cose la piel de una persona herida. La manta tiene los colores que adquiere la piel cuando ha sido maltratada; se parece al color de la sangre seca. A flor de piel es extremadamente frágil, como la vida misma.
Esta obra es un homenaje que Salcedo hace a las mujeres violadas, torturadas y brutalmente asesinadas en el contexto del conflicto armado colombiano. Salcedo concibió esta obra mientras investigaba los hechos que rodearon a una enfermera que fue torturada hasta la muerte en Colombia y cuyo cuerpo desmembrado nunca ha sido encontrado. La artista ha calificado la obra como una ofrenda floral a esta víctima, así como a todas las personas que han sido afectadas por la violencia. "Suturar los pétalos es muy importante porque es una forma de unir todas estas partes", Salcedo. Con esta obra la artista comunica cómo la violencia deja cicatrices no sólo en los cuerpos de quienes la padecen, sino también en la memoria colectiva de un pueblo.